Todo lo que tienes que hacer es ponerte los cascos, tirarte al suelo, y escuchar el CD de tu vida.
Canción tras canción, no puedes saltarte ninguna, todas han pasado, y de una forma u otra servirán para seguir adelante. No te arrepientas, no te juzgues, se quien eres. Y no hay nada mejor para el mundo.
Pausa, rebobinar, play, y más y más aún. Nunca pares la música, no dejes de descubrir sonidos para lograr explicar el caos que tienes dentro.
Y si te sale una lágrima cuando lo escuchas, no tengas miedo, es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción preferida.
Y si te sale una lágrima cuando lo escuchas, no tengas miedo, es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción preferida.
Ayer fue una de mis desesperantes noches de irremediable insomnio. Me puse a ver por enésima vez "A tres metros sobre el cielo", la versión italiana, por supuesto.
Primero leí el libro y como adolescente que soy, me enloqueció de forma espectacular. Es la típica historia de amor entre "el chico malo" y la niña "pura e inocente", temática escogida por innumerables guionistas de cine y novelistas. Pero aunque el tema pueda resultar repetitivo o demasiado común, esta historia no es como otras, esta es diferente.
El libro enamora, los personajes enamoran, el relato enamora...
Stephano Mancini, "STEP": El es el "chico malo". Guapo, con buen corazón. Siempre lleva su "chupa" de cuero, se desplaza en moto y va acompañado de su incondicional amigo Pollo, su único verdadero amigo.
Se enamora perdidamente de Babi.
Roberta Gervasi, "BABI": Ella es la niña "pura e inocente". Matriculada en una buena escuela, interesada en sus estudios y de familia con intachable reputación. Su mejor amiga, Pallina Lombardi, es quien inicia el vínculo entre el mundo de Step y el mundo de Babi.
Babi se enamora perdidamente de Step.
No quiero dar más detalles sobre esta "bellíssima" historia que transcurre en la ciudad de Roma, Italia, para que aquellos que no hayan tenido el placer de leer el libro de Federico Moccia o ver la película original en italiano subtitulada en español, puedan disfrutarla como yo y otros miles de lectores lo hemos hecho.
El año pasado se estrenó la versión española del libro protagonizada por Mario Casas y María Valverde, y he de reconocer que a pesar de las modificaciones que sufre la historia respecto al libro, la película es bastante buena y se aproxima mucho a la original.